Si
me quitáis las palabras
buscadme
en el cementerio
allí
me veréis silencioso
rodeado
de mis lobos.
Si me quitáis
las palabras
sabed que
me arrebatáis
el sustento
de mi alma
la
esencia de mi pelaje.
Si me
quitáis las palabras
y se me
prohíbe cruelmente
soñar con
quimeras, a mí,
que me
sustento de sueños
buscadme
en mi tumba
allí
me encontraréis silencioso.
Mis lobos
aullarán por mí.
Ellos
serán la voz de mis palabras.
Guardianes
de mi tumba callada.
Cuando
sienta ese nudo en la garganta
y acercarse
esos prudentes pasos de la muerte
que
lleguen reservados y silentes,
solo
recordaré la vez que intentasteis
quitarme
las palabras
y dejarme
huérfano de promesas.
Mis lobos
hablarán por mí.
Evocarán
la lucha que gané.
Mis lobos:
centinelas de mis palabras vivas.
) mírenlos. Por el día son como ustedes.En la noche les crecen los colmillos y andan a cuatro patas, se desnudan y recubren de pelo su cuerpo. Se convierten en lobos:guardianes de palabras...(
Que precioso poema. Tienes muchísimo talento, guapo! :)
ResponderEliminarmuchas gracias Diegui por comentar. Un abrazo!!!!
EliminarDa gusto que después de tanto tiempo ausente de este mundillo vuelva y tenga maravillas como esta para poder leer.
ResponderEliminarY es curioso que sea de esta forma, tú hablando de lobos. No sé que tiene estos últimamente que me gustan un montón. Y como no creo en las coincidencias, amigo, tan sólo decirte que a pesar de no conocernos, pensamos muy parecido.
Un abrazo enorme!
será el misterio de la colina,o el hechizo de esos lobos de ojos ceniza...me alegra tener cosas en común contigo Pablo y ya te echaba de menos por aquí...un abrazo !!!!
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