martes, 13 de mayo de 2014

UN AULLIDO LASTIMERO III

De nuevo a esta colina vuelvo,
sin luna, sin estrellas, sin aullido apenas.
Escuchar el viento, que desolado va silbando:
¿dónde está el hogar al que llamas tuyo?
No tengo más morada que su pecho.
No tengo más cobijo que su abrazo,
ni más casa que acoja, de las tormentas, mi cuerpo.
Y será la madrugada quien me mate,
y me traiga, cual relámpago, tu recuerdo
pero siempre, como lobo malherido
te lloraré silencioso, en esta colina.
)...serán los recuerdos que se agolpan uno a uno y van saliendo, golpeando el pecho, haciendo un nudo en la garganta(