si no escarcha que congela, en el jardín,
las flores que plantamos.
Es el tiempo y la distancia quien destroza
las tejas de nuestra casa.
Las paredes se desconchan,
las puertas se descuelgan,
es ruinosa nuestra casa.
Ya no es fuego, lo nuestro,
es una llama que se apaga.
Un lucero a lo lejos.
Los cristales se rompieron de nuestras ventanas.
Ya no silba el viento nuestros te quieros.
Y aún podré quererte en la distancia,
pero compañero
ya todo perdió el esplendor de otros tiempos.
Y aún podré besarte cuando vuelvas,
mas confieso -compañero-
aunque duela,
mi música está apagada
y mis campanas tocan a entierro.
)lo que fue nuestro se ha perdido...quizá un día -sin esperarlo- lo volvemos a encontrar, como se encuentran las cosas cuando no las buscas...(
©poesía incluida en mi libro "TENDRÍAS QUE ESTAR AQUÍ"
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